PERRO NEGRO,EL

Nos encontramos ante un  lbum ilustrado muy sofisticado en suplanteamiento que sigue un esquema narrativo que a los ni¤os lesresulta familiar: se trata de una enumeraci¢n que va "in crecendo"hasta llegar al climax para retornar, luego, al punto de partida y al equilibrio final. Con ello se busca crear una expectaci¢n en ellector que pasar  las p ginas con inter‚s para conocer cu l es laconclusi¢n de esta intriga.
Para conseguir esto el autor e ilustrador pone en funcionamiento unesquema repetido e id‚ntico tanto en el texto como en la ilustraci¢n,de manera que el texto presenta a cada uno de los miembros de unafamilia: padre, madre y dos hijos, que al mirar por la ventana ven aun perro negro que va haci‚ndose m s y m s grande a medida que avanzala narraci¢n y el miedo aumenta y se extiende el p nico.
Si el padre ve un perro negro del tama¤o de un tigre, la madre loencuentra de la talla de un elefante, la hija mayor de un tiranosaurio y el hijo de un Gran Zamp¢n. Y todos ellos preguntan de maneraid‚ntica: "¿Sab‚is que ah¡ fuera hay un perro del tama¤o de un...? ¿Yqu‚ hacemos?" y cada uno da una respuesta m s alocada. Hasta aqu¡ lailustraci¢n tambi‚n funciona con un esquema repetido: en la p gina dela izquierda, acompa¤ando al texto, el ilustrador recuadra peque¤asescenas en color sepia, que forman parte de la ilustraci¢n grande queocupa la p gina de la derecha donde siempre tenemos al protagonistahorrorizado ante la visi¢n del perro negro. Estas peque¤asilustraciones introducen en el relato una gran cantidad de detalles en los que vemos a los personajes en acci¢n. Este esquema llega hasta la parte central del libro en el que comprobamos, con sorpresa, c¢mo lam s peque¤a de la familia: Chiqui (a quien todav¡a no conoc¡amos)decide salir al exterior de la casa para encararse con este monstruoque toda su familia ha visto. Y aqu¡, al igual que ocurre en el librode Maurice Sendak: Donde viven los monstruos, el perro ocupar  ladoble p gina hasta desbordarla, con su enorme cabeza y no dejar  apenas sitio para la min£scula ni¤a que ha salido a enfrentarse con lafiera. A partir de este momento de la narraci¢n siempre en formatohorizontal y ocupando la doble p gina veremos como el perro corredetr s de la ni¤a empeque¤eci‚ndose cada vez m s hasta entrar a lacasa, mansamente, y formar parte de la vida cotidiana de esta familiaextravagante.
Este encaje tan elaborado de narraci¢n e ilustraci¢n, que busca crearemoci¢n e intriga se complementa con el humor de las im genes quesiendo de un realismo po‚tico, crean un hogar c lido y disparatado yun paisaje nevado en el exterior con ecos de Brueghel.
El resultado es un libro sorprendente donde el temor exagerado de lafamilia se enfrenta a la actitud ‚pica y valiente de la m s peque¤aque sabe que con astucia y con una canci¢n, el perro volver  a sutama¤o.
Este juego entre la realidad y la ficci¢n, deja al lector con la dudade saber si de verdad Chiqui se enfrent¢ a un monstruo o el temor desu familia cre¢ el monstruo y ella solo tuvo que aplicar un poco desensatez para que todo volviera a su lugar. Esta es la literatura, que no trata temas definidos, sino que construye historias dejando muchos caminos abiertos a la interpretaci¢n y al juego.